En los tiempos que corren, resulta imposible hallar congruencia en las personas e instituciones. Todo el mundo se etiqueta por entero a unas siglas o doctrina política y, lo asumen todo, a pesar de que haya cosas que les repugne la conciencia.Cualquier persona que me conozca mínimamente tendrá por sentado que soy un franquista y español hasta la medula y que como tal voy a morir. Pero también saben que soy un protector de los animales. He rescatado gatos de altos tejados, he salvado a perros y gatos, les he dado un hogar de acogida, doy de comer a los más desgraciados que viven en la calle. En la protectora he estado al cuidado de cuatrocientos perros y gatos de sol a sol. Me he enfrentado a la presidenta y me ha valido amenazas de muerte anonimas y personales Veo un camión con ganado o aves, pasando frío y no puedo ni mirar. Desearía ser vegetariano pero no trago con verduras y hortalizas, por ello me siento mal. Como católico tengo una veneración especial por san Francisco de Asís. El como nadie amo a los animales como criaturas de Dios. El santo Padre Juan Pablo II instituyo que los animales tenían un alma colectiva, lo cuál es un trazo más de su sabiduría. Así que nadie dudara de mi inequívoco amor a España y los animales.
Pero en estas fechas se me ha presentado un conflicto de intereses. Sabido es que el independentismo catalán quiere a través del parlamento, abolir la fiesta taurina. Nunca he estado a favor de este espectáculo. Al contrario. Hiere lo más profundo de mi ser. Hace meses un compañero de trabajo que pertenece a una protectora, me solicito mi firma y no dude en hacerlo. Supongo que esas firmas serian las que han conducido hasta esta situación. El separatismo con esas acciones, lo que menos le preocupa son los toros, si no lo que simbolizan. Ahí entramos en esas incongruencias de las que me refería al inicio. Toros no, en una plaza de toros. Pero si en esas salvajadas de los “correbous”, donde en las astas se les prende fuego y recorren las calles con el pánico propio de esa vejatoria iluminaria y el estrépito del bullicio. No hay sangre. Pero quizás el toro pase más terror que en un ruedo. Esta es la hipocresía del separatismo que condenan lo que huele a España y, sin embargo protegen algo peor como es este caso y, ahí no les duele prendas de justificarse en la tradición. He escuchado a Puigcercos presumiendo de que Cataluña es el “país” más avanzado en los derechos de los animales. ¡Mentira! Yo estuve en una protectora que se construyo en pleno franquismo. Albergaba a casi cuatrocientos perros. Un puñado de mujeres con las cuotas de sus socios y una subvención del Ayuntamiento la llevaban adelante. Cada día del año, fuese Navidad o año nuevo, helara o nevara, esas mujeres acudían a pie al refugio con sus dos kilómetros largos del centro de la ciudad, hasta que un día, una alemana se hizo con la presidencia y, convirtió el refugio en un campo de exterminio. Nos opusimos a ello y, los que hoy claman contra la lidia, se encontraron muy a gusto con el nuevo giro. Los que nos oponíamos, fuimos objeto de toda clase de amenazas y agresiones físicas. No pudimos hacer nada por echar a esa presidenta que estaba apoyada por todas las instituciones que hoy, hipócritamente dicen defender a los toros. La protectora en la que morían de viejos los acogidos, ahora estan de puro transito, se ha convertido en un negocio y una presidenta a perpetuidad. El ayuntamiento tan amante de los animales, multa a las personas que den comida a los gatos callejeros. No multa a la gente que tiene atado un perro de por vida, pasando frío y calor, muchos sin agua ni bebida fresca. Cada año se abandonan unos veinte mil perros y no pasa nada. Pero es que además. Esos que ahora tanto se rasgan las vestiduras por los toros, son los que están a favor del genocidio del aborto, los que callan como perros mudos, por las matanzas de terneras y corderos al más puro estilo bárbaro por los musulmanes, con una muerte espantosa que clama al cielo. Lo hizo una protectora como Brigitte Bardot y la procesaron por racista. La “protectora” de Manresa, envía perros a Alemania y, nos tenemos que creer que van a domicilios particulares y, encima regalan furgonetas. ¡Quien sabe el destino de esos pobres animales! Nadie se lo cree, todos pensamos que van a laboratorios para experimentos o para productos de belleza.Los que ahora presumen de ser el “país” más avanzado en la defensa de los animales, deberían de aprender y mucho de otros países, entre ellos Italia, donde los gatos campan a sus anchas por Roma y darles de comer esta bien visto y no como aquí que insultan a la gente de buen corazón y encima les multan.
Es bien evidente de que esa derogación, no tiene otra motivación que la de extirpar todo lo que suene o simbolice a lo español. Es más piadosa una corrida de toros que, esos “correbous” que son martirizados por las calles. Cuando alguien quiere dar una lección de civismo que empiece por casa y, si no que calle. Estas imagenes que publico, estan tomadas en Cataluña donde son consideradas un patrimonio cultural. A los separatistas lo unico que les mueve en esta vida es el odio a España. Es tal el complejo que tienen que se han inventado una historia que nada tiene que ver con la real. Cualquier texto de la historia de Cataluña desde la mierdocracia a nuestros días, cualquier verdad es pura coincidencia. Lo del 11 de Septiembre es que ya pasa de la raya en paroxismo. No fue tal guerra de España contra Cataluña, si no la guerra de sucesión. Rafael de Casanovas solo resulto herido y murio de viejo ejerciendo su profesión en San Baudilio de Llobregat (hoy, Sant Boi), tampoco enarbolaba la bandera del reino de Aragón que es la catalana, si no en pendon de santa Eulalia. Cuando se hacen estas ceremonias ante esa estatua, si tuviesen dignidad se les caeria la cara de verguenza. Porque además lo unico que celebran fue la derrota. !!!HIPOCRITAS!!!
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